Las mejores alfombras de esparto del 2025

La alfombra oval de HERSIG en Natural está pensada para quienes buscan un toque auténtico y sencillo en casa, y funciona genial tanto dentro como fuera. Su tamaño de 100 cm la hace perfecta para un rincón tranquilo o la entrada, dando un aire relajado sin pasarse. Además, si te mola lo sostenible, el esparto es un material que aguanta el trote diario y es respetuoso con el medio ambiente, algo que hoy en día se agradece un montón.

Lo mejor es que se limpia sin complicaciones: basta con pasar una escoba o un trapo húmedo, lo que viene de lujo para tenerla siempre decente sin líos. Al ser artesanal, puede que notes pequeñas variaciones en color o forma, pero eso le da un encanto natural que no se ve en alfombras industriales. Así que si quieres algo práctico, con estilo sencillo y un punto eco, esta alfombra parece encajar sin mucho drama.

La alfombra de vinilo Vilber con efecto esparto en color Beige - 01 es justo lo que necesitas si buscas algo práctico para darle un toque natural a tu casa sin complicarte. Sus dimensiones de 0 cms de alto x 50.8 cms de largo x 99.06 cms de ancho la hacen perfecta para zonas de paso moderado o para poner en terrazas cubiertas, ideal si quieres evitar manchas o suciedad en espacios que no tengan mucho tránsito. Además, su composición de poliéster y PVC garantiza que sea bastante resistente y fácil de limpiar.

Lo que mola es lo simple que resulta ponerla: solo tienes que desenrollarla y listo, no hace falta pegarla ni nada raro. Además, su color sólido aguanta bien el paso del tiempo sin perder la esencia del esparto y da bastante sensación de limpieza, cosa que se agradece en casa. No parece la típica alfombra delicada que se estropea rápido, más bien al revés. Para un ambiente relajado y con estilo natural, parece una apuesta bastante segura.

Este tipo de alfombra de Jardin202 puede ser justo lo que necesitas si buscas darle un toque natural y sencillo a cualquier rincón de casa, ya sea en el recibidor, el salón o incluso en el baño. Su diseño trenzado a mano y el color natural del esparto encajan con deco muy variadas, y gracias a sus tamaños disponibles, puedes adaptarla según el espacio que tengas.

Lo que mola es que el esparto es un material muy resistente y a la vez flexible, así que aguanta bien el ajetreo diario sin perder forma. Además, limpiarla no es un rollo: con una pasada de aspiradora o un poco de agua tibia y jabón neutro la tendrás lista en un momento. Si buscas algo funcional pero con un aire rústico y fresco, esta alfombra parece un complemento que te puede salvar bien en casa.