Los mejores calefactores deLonghi del 2025

Este calefactor cerámico de De'Longhi en antracita es una opción interesante para quien necesite una solución rápida y eficiente para calentar espacios no demasiado grandes, como el salón o una habitación de hasta 55 metros cuadrados. Su diseño compacto, con unas dimensiones de 17.78 cms de alto x 12.7 cms de largo x 25.4 cms de ancho y un peso liviano de 0.9 kg, facilita moverlo de un lado a otro sin problema. Además, si valoras la seguridad, lleva función antihielo, termostato ambiente y una lámpara de control que te da tranquilidad mientras está encendido.

Lo que me parece útil es la tecnología cerámica con elemento PTC que regula la energía según la temperatura, evitando que se caliente en exceso y controlando el gasto eléctrico sin complicaciones. Tiene dos niveles de potencia y se nota que De'Longhi ha puesto cuidado en detalles de seguridad y eficiencia, lo que inspira confianza en el producto. Para alguien que busque algo sencillo y cómodo para los días fríos sin complicarse con aparatos muy grandes, este calefactor parece cumplir bastante bien.

Este calefactor De'Longhi en blanco tiene un tamaño compacto, con sus 12.7 cms de alto x 12.7 cms de largo x 5.08 cms de ancho, ideal para espacios pequeños o para llevar a la oficina. Su peso de 4.95 kg le da estabilidad, nada de preocupaciones porque se vuelque con un golpe accidental. Es perfecto para quienes buscan algo práctico y sencillo para calentar una habitación sin complicarse; por ejemplo, estudiantes en pisos con poca calefacción o en dormitorios que no suelen calentar mucho.

La función que más llama la atención es el termostato ambiente que mantiene automáticamente la temperatura que pongas, algo que ayuda a no desperdiciar energía y evitar sentir frío de repente. También tiene tres niveles de potencia, que vienen bien según el frío que haga. Además, el enrollacable en la base facilita guardarlo sin líos y el termostato de seguridad es un plus para sentirse tranquilo. Con la garantía de 2 años, parece una opción fiable para el día a día sin florituras. No es un aparato sofisticado, pero cumple con lo que promete sin complicaciones.

Para quienes necesitan un calefactor eficiente y fácil de mover, el De'Longhi HFX60V20 puede ser un buen aliado, sobre todo en habitaciones con un tamaño medio. Su diseño compacto y ligero, con apenas 1.35 kg, facilita que puedas llevarlo de una estancia a otra sin complicaciones, ideal si eres un poco despistado con dónde dejarlo funcionando. Además, el sistema cerámico autorregula la potencia, así que no se va a pasar de consumo ni a dejar la habitación demasiado caliente.

Una cosa que me parece bastante práctica es la pantalla LED con controles sencillos, junto al temporizador de 24 horas, que te permite programar cuando quieres que funcione, sin tener que estar pendiente todo el rato. Otro punto a favor es el sistema de seguridad antivuelco y la protección anticongelante, que da un plus de confianza si tienes niños o mascotas cerca. Si buscas algo para calentar sin que te deje la factura por las nubes y con buen nivel de seguridad, este aparato tiene pinta de cumplir bastante bien.